10 minutos con Jesús: Quiero ser tu cielo
- Categoría: 10 minutos con Jesús
«Mi alma puede ser ese cielo, en el que tu Jesús siempre estés presente...»
«Mi alma puede ser ese cielo, en el que tu Jesús siempre estés presente...»
De la misma manera que los ángeles han estado presente en los momentos más gozosos y dramáticos de la vida de Cristo, también han estado presentes en la historia de cada uno de nosotros. En este nuevo podcast de «Palabras de vida desde la misión» el P. Christopher Hartley profundiza en la misión de estas criaturas celestiales. ¡Renueva tu visión de fe y glorifica al Creador de todo lo visible e invisible!
Para Lutero no existe la Iglesia visible y, por lo tanto, no hay papa, ni orden sacerdotal, ni jerarquía, ni vida religiosa, ni tradición, ni sacramentos y, de manera especial, no existen ni la Eucaristía ni la Santa Misa. Es difícil entender el éxito de la doctrina luterana sin comprender el contexto histórico en el que nace, porque la causa principal de la herejía protestante no es teológica, sino la tragedia personal de Lutero en un contexto histórico propicio. D. José Enrique Bustos Pueche —decano y profesor emérito de la Facultad de Derecho de la Universidad de Alcalá de Henares (España)— nos describe este contexto histórico en el que el protestantismo se implanta, en último término, «a sangre y fuego» y por sórdidos intereses políticos y económicos.
«¿Qué clase de fruto estoy dando en mi vida?» Una vez más el P. Christopher Hartley cuestiona nuestro obrar, invitándonos a no quedarnos en palabras, sino cumplir realmente la voluntad del Señor. Soplará el viento, vendrá la cruz. ¿Qué pasará con tu vida, se derrumbará? ¡Todavía es tiempo para edificar! ¡No te pierdas este podcast de «Palabras de vida desde la misión»!
«“Si quieres, puedes limpiarme”. Compadecido, extendió la mano y lo tocó diciendo: “Quiero: queda limpio”. La lepra se le quitó inmediatamente y quedó limpio».
¿Alguna vez te ha pasado que una cosa que aparentemente era muy trágica se ha convertido en una de las mayores gracias de tu vida? Pues esta historia es un buen ejemplo de ello. ¿Quieres saber por qué? ¡No te pierdas ni una palabra!
<
«Todo el que pide recibe, y el que busca halla, y al que llama se le abre…»
Citando a San Juan de la Cruz, el P. Christopher Hartley enseña que en el camino de la vida espiritual se avanza más quitando que poniendo. De la misma manera que se retiran las piedras y la mala hierba para poder sembrar, tenemos que preparar nuestro corazón para recibir la semilla de la Palabra de Dios, que cae continuamente. ¡Aprende a ser tierra buena según el Corazón de Cristo con este podcast de «Palabras de vida desde la misión»!
Simón Agulló y Elena Francés dan testimonio en «Testigos de la esperanza» del poder de la gracia de Dios que les sostuvo para vivir la enfermedad y muerte de María, su hija mayor, a consecuencia de un tumor cerebral. María le decía a sus padres: «No os preocupéis, lo único importante es lo que nos queremos, porque solo el amor dura para la vida eterna». Y, a pesar de su propio sufrimiento, conmovida por la tristeza de los enfermos que no tienen a Dios, hacía apostolado entre ellos. Elena y Simón confiesan que solo con Dios se puede vivir el sufrimiento, porque Dios es nuestro Padre y nos fortalece para aceptar y vivir su voluntad.
«¿Qué buscas cuando rezas?...»
«La gente comió hasta quedar saciada y de los trozos que sobraron llenaron siete canastas; eran unos cuatro mil y los despidió; y enseguida montó en la barca con sus discípulos y se fue a la región de Dalmanuta».
«¿Qué cosa mejor podemos traer en el corazón, pronunciar con la boca, escribir con la pluma, que estas palabras, Gracias a Dios?»
Cristina Fernández Girón es una niña de once años. Su cariño y confianza por Nuestra Madre del Cielo nació en el seno de su propia familia, en la que es la pequeña de cuatro hermanas. Cristina conserva el recuerdo de rezar el rosario en casa siendo ella muy pequeña, antes incluso de saber recitar las oraciones. A sus once años explica que el rosario para ella «es cogerle el dedo a la Virgen».
Gracias a la generosidad de nuestros bienhechores, hemos podido seguir hasta ahora. Pero las exigencias van siempre en aumento y con frecuencia surgen gastos imprevistos, como reparaciones, adquisición de nuevas máquinas, etc.
Más información aquí.



